Manirrota. Cabeza hueca. Mala cabeza. Vale, que no cunda el pánico. Todavía quedan horas y seguro que se puede comprar algo, ¿no? Si yo sabía que en lugar de estar pegándome cabezazos contra la mesa de la biblio tenía algo que hacer...y no, no era comprarme cosas para mí.

Bueno, rápido, Charadita, pensemos que podemos comprar con la porquería de presupuesto que has guardado. ¡Upps! "Papi, ¿me dejas dinero para comprar el regalo de mami?Gracias, eres el mejor del mundo"... "Mamiiiiiiiiiiiiiiiiiiiii, ¿me ayudas a elegir algo para papi?¡Que no tengo ni idea!" Y ese es , de momento, mi plan magistral. Lo malo es que no se aplica para los hermanos y menos cuando ellos ya te llevan torturando con "ya verás lo que te he comprado, vas a flipar..." Y la única que está igual que yo es Jules, pero con la tontería esa de que está embarazada y que Little M ya es un regalo, se escapa de todo esto...Excusas...eh, un momento, ¿y si me pongo yo un cojín en la tripa y doy la sorpresa?Sí, gano tiempo, pero poco. Hay que seguir pensando como ser imaginativa y comprar muchas cosas, buenas y baratas. Con lo feliz que era en preescolar cuando regalaba dibujos con macarrones pegados...

Solo me queda rezar para que mañana a las 10 de la mañana la zona de Nervión no esté muy llena de gente más fuerte que yo, que si tengo que tirarle a alguien de los pelos o pegarle con mi guante prefiero adversarias más pequeñas que yo.

Menos mal que yo me he hecho mis propios autorregalos por si se enfadan y no me dan los suyos.

Hala,me voy a tumbar un rato que de tanto estrés me he agotado.

Sed muy, muy buenos que os quedan horas... Seguid siendo muy felices, mis niñ@s