No consigo entender el porqué de andar siempre posponiendo todo lo que tenemos que hacer. Total, tarde o temprano acabaremos haciéndolo y seguro que nos arrepentiremos de no haber pasado el mal trago antes.
Si fuese un gran trivial y tuviera que ganarme el viaje alrededor del mundo encontrando el motivo, seguramente diría Miedo. Miedo en todas sus vertientes: miedo al error, al fracaso,al rechazo, a la vergüenza...O puede que, simplemente, sea miedo a tomar una decisión y equivocarnos y ya no poder dar marcha atrás o hacer un pasito de baile a lo Michael Jackson y desaparecer de la escena del crimen como si nada hubiera pasado...
¿Es normal que nos paralice el miedo, que nos deje sin respiración?¿Es normal tener miedo de no controlar siempre la situación?
Fuera como fuese, no podemos negar que cuando el dolor de no hacer algo es más insoportable que el miedo a hacerlo, es como si cargáramos con un peso similar al de la intérprete de Precious a nuestra espalda. Si dudas, estás perdid@.
Y no podemos decir que no lo sabíamos, que no nos habían avisado, porque estamos hartos de leer frases de autoayuda sobre el bien y el mal, de viejos proverbios escapados de las galletas de Facebook y que se convierten en gurús cibernéticos de más de un amigo,de consejos de los abuelos para que no sigamos perdiendo el tiempo y disfrutemos ahora que somos jóvenes y tenemos todo el tiempo del mundo.
Pero noooooooooo, no escarmentamos y hasta que no estamos en el fango, llenos hasta las orejas de algo similar a lo que pisa la pobre Aurori en la historia de Almendra, no reaccionamos y puede que ya sea tarde. O puede que el destino se alíe con nosotros y nos dé un guiño. La excepción que toda regla tiene que tener.