¡Ay, querida voz de la conciencia!¿Dónde narices estabas cuando me han convencido para tangarme la academia?¿Dónde estaba tu voz en off cuando Buda me tentaba cual Eva?¿Qué estabas haciendo más importante que estar pendiente de que aguantase atenta en una clase de cirugía??Yo antes no era así, no me dejaba convencer, resistía a las manzanas porque tenía dos angelitos rubios vestidos de flores como recién salidos de la casa de la pradera y siempre me decían "No, Charada, no, eso no está bien..." Y ahora solo tengo un angelito vestido de cuero que me tienta y que ha acabado a latigazos con su compañera y que se ha apoderado de mi voluntad(bueno, vale, puede que yo deje que se apodere porque su plan era mucho más divertido que estar mirando la ventana y pensando que hacía demasiado sol para estar allí)...Pero lo peor que tenía que volver a casa, tenía que explicar que me había ido temprano de casa, que había dejado de ir a cumplir con obligaciones familiares("Por Dios, papi, que tengo obligaciones, que me juego mucho si no voy o ¿Es que quieres que suspenda el MIR y tenga que repetirlo?" creo que fue mi respuesta cuando rechacé ir a una comida familiar) para acabar sentada en el campo del Sevilla al sol y tomándome un helado mientras hablábamos de temas trascendentales como son la elección de un peinado para una boda y de lo cansado que va a ser esta feria...( el G10 y nosotras son la misma cosa como veis) y yo no sé mentir, siempre acabo contándolo todo ante la presión, así que he tenido que recurrir a la sabiduría popular(sí, ya sabéis, " En caso de peligro cierto, lo mejor es hacerse el muerto") e irme a tumbar un rato porque "el día ha sido muy intenso, mami y tengo la cabeza embotada". Volved, angelitos, volved antes de que quieran saber detalles y yo me acabe pasando al lado oscuro. Mala, niña mala.